AGRADECIMIENTO Y DEDICATORIA
Gracias
Padre por la luz que haz arrojado en mi camino,
por la inspiración con la que has movido mis dedos para que escribieran
tan sólo un poco sobre la infinitud y el esplendor de Tu bondad, de Tu verdad y
de Tu belleza.
Por
haberme acercado a aquellos hermanos, a quienes también agradezco, porque
guiados
por Ti, supieron persuadirme para que me encontrara Contigo en la mitad de la
montaña, hasta donde tuve que escalar y hasta donde Tu descendiste para
cubrirme con Tu manto de Amor, develando tu mágica presencia, de la cual no
necesito más comprobar, palpar o demostrar su existencia.
Allí
en la mitad del camino donde aprendí asumirTe en mí, reconociéndome como tu
hijo y fiel siervo.
Y
entre hermanos a los cuales me refiero, quiero agradecer muy especialmente, a
Eli, a quien dedico esta entrega por haberme mostrado el valor del número, del
movimiento y del verbo, por haberme enseñado a amar a lo que más negaba de mi y
a mis contradicciones, por haber propiciado el inicio de mi encuentro con mi
Ser y por haberme permitido ver claramente quienes son mis iguales y verdaderos
amigos.
Prólogo
“Poesía Divina para las parejas
cósmicas” es un libro que se ha escrito sobre basamentos matemáticos,
utilizando la magia de los cuadros pitagóricos de orden 12.
Llamémoslo Oráculo Cósmico para las parejas zodiacales, puesto que en él se revela la misión de cada pareja como un comando espiritual para el crecimiento interior; la configuración, el desarrollo, la expansión y la expresión del Ser de cada miembro de la pareja y de la pareja misma.
Entiéndase por pareja cósmica a la reunión de
dos personas que comparten la energía y su tránsito por la vida en un momento y
tiempo determinado, bajo circunstancias particulares y que juntas tienen una
misión que cumplir para el provecho y el bien individual, de la pareja y del
mayor número de personas posibles.
Éste libro representa al Verbo del
Padre en acción. Lo que Él ha diseñado para Sus hijos y para las parejas que
ellos formen.
Es la poesía del Amor verdadero,
bello y bueno.
Nos presenta al Padre Creador como
un Ser inmensurablemente amoroso y espléndido cuando dice a Sus creaturas los designios que tiene para ellas,
dotándolas al mismo tiempo del libre albedrío para que decidan libremente.
También nos llena con su infinita bondad cuando desciende en nosotros para
mostrarnos que somos una parte Suya, un fractal del Universo, y nos conduce en
ascenso hasta la cima del Hogar Común. Nos conmueve con su belleza cuando nos
permite reflejarnos en Él y vernos en el otro
Es un libro que fusiona con
sabiduría a la ciencia y al arte, y los guía por inspiración divina para
manifestar
Se escribe en un momento de total
confusión planetaria, en la que los valores del Ser parecen estar perdidos o
menospreciados.
En el que la guerra y la destrucción
de grandes masas de seres humanos por parte del hombre mismo, movido por su ego
y afán de poder y control, amenazan insistentemente la continuidad de la vida
en
En el que el poder pretendido
por muchos gobernantes de naciones les
distorsiona la capacidad de actuar y dirigirlas por altruismo, por el
intercambio balanceado, equitativo y armónico de las riquezas y los mueve
exclusivamente por ambición material y satisfacción propia, esquivando las
metas más elevadas del Ser, las que conllevan a la plena realización del
individuo y por ende del colectivo.
Por esta razón, “Poesía Divina y las parejas
cósmicas” es una llave que abre puertas de salida para la liberación del Alma
del Planeta Tierra, una garantía para la supervivencia del hombre “realmente
nuevo”, que ha hecho el encuentro consigo mismo y con su Creador, que ha podido
reconciliar padre y madre dentro de si y que está dispuesto a servirLe con una
mente pura y libre, no condicionada.
Sin embargo no pretende hacer
proselitismo espiritual, de convencer a nadie de cuál es el camino que tiene
que seguir para salvarse venciendo a sus fantasmas, especialmente el que los
genera a todos: el miedo a la soledad y a la muerte. ¿O acaso no es éste el
“máximo mal”?
No da recetas para la liberación,
más bien ofrece vías para desatar procesos internos de deslastre, purificación
y sanación.
Quienes quieran atreverse a seguir
por estas vías por voluntad propia, tal como la esencia del libro propone,
asumiendo responsablemente sus pérdidas y ganancias, se encontrarán un espejo
de seis lados al final del camino y detrás de él, las puertas del cielo y de la
eternidad.
CONCEPTOS MATEMÁTICOS BÁSICOS Y
ESTRCTURACIÓN MATEMATICA DEL LIBRO
Cabe ahora definir al cuadro
pitagórico como aquella matriz de orden “n”, formada por “n” filas y “n”
columnas, en la que cada uno de sus “n x n” números aparece sólo una vez y todos ellos se organizan de tal manera que
cada fila, cada columna y las dos diagonales de la matriz, suman siempre el
mismo número. Éstos cuadros no son más
que balance, ritmo y equilibrio entre los números que los componen.
El presente libro se construye en
función de las parejas zodiacales, para lo cual hubo que calcular el total de
parejas que se pueden obtener al aparear los distintos signos del zodiaco.
Teniendo en cuenta que éstos son 12,
tendremos entonces 78 posibles parejas, es decir 78 cuadros mágicos
constituídos por 144 números, con especificidad para cada pareja. Quedan
incluídas las 12 parejas del mismo signo.
Así tenemos un lote de 12 parejas
que resultan de combinar al primer signo
con el segundo, al segundo con el tercero y así sucesivamente hasta completar
el círculo zodiacal. Acá encontramos a las parejas formadas por los signos:
Aries-Tauro, Tauro-Géminis, Géminis-Cáncer, Cáncer-Leo, Leo-Virgo, Virgo-Libra,
Libra-Escorpio, Escorpio-Sagitario, Sagitario-Capricornio, Capricornio-Acuario,
Acuario-Piscis, Piscis –Aries.
Este apareamiento se corresponde al
orden natural de los números que van del 1 al 144, distribuídos en 12 filas de
12 números cada una. En la primera fila se ubican los números que van del 1 al
12, en la segunda los que van del 13 al 24 y así sucesivamente hasta agotar los
144.
Ésta distribución no permite la
constitución de un cuadro mágico como tal. Para ello, y basándose siempre en
ese orden establecido, hay que intervenir a la matriz con un elemento de
transformación que la convierta en cuadro mágico. Este elemento de
transformación es el mismo para todos los cuadros construídos,
independientemente del orden en el que se colocan los números, el cual
dependerá de los signos que se apareen. Este tratamiento le da carácter unitivo
y fundamento científico a esta metodología.
Según lo anteriormente expuesto
tenemos el siguiente ejemplo: la pareja escogida es la formada por los signos
Virgo(6) y Capricornio(10), entonces el orden natural de los dígitos que van
del 1 al 12, estaría ahora modificado y condicionado por la dupla 6-10, que
corresponde a estos signos, quedando determinado el orden de la primera fila de
la matriz y en consecuencia el del resto de la matriz, como: 6, 10, 2, 7, 11, 3, 8, 12, 1, 5, 9
Luego tenemos un segundo lote de 12
parejas generadas por la combinación del primer signo con el tercero, el
tercero con el quinto, hasta completar el círculo de los impares y por la
combinación del segundo signo con el cuarto, el cuarto con el sexto y así
sucesivamente hasta completar el círculo de los pares. Entonces obtenemos a las
parejas siguientes: Aries-Géminis, Géminis-Leo, Leo-Libra, Libra-Sagitario,
Sagitario-Acuario, Acuario-Aries, Tauro-Cáncer, Cáncer-Virgo, Virgo-Escorpio,
Escorpio-Capricornio, Capricornio-Piscis, Piscis-Tauro.
El tercer lote esta formado por las
12 parejas que resultan de combinar al primer signo con el cuarto, al cuarto
con el séptimo, al séptimo con el décimo, el décimo con el primero, es decir
tomando los signos que se arreglan en los cuadrantes del círculo. Por rotar a
éste dos veces y hacer las combinaciones pertinentes con cada rotación, se
obtienen las 8 parejas restantes. De esta formación tenemos a las parejas:
Aries-Cáncer, Cáncer-Libra, Libra-Capricornio, Capricornio-Aries, Tauro-Leo,
Leo-Escorpio, Escorpio-Acuario, Acuario-Tauro, Géminis-Virgo, Virgo-Sagitario,
Sagitario-Piscis, Piscis-Géminis.
Seguidamente tenemos un cuarto lote
de 12 parejas de signos, el de las 4 Tríadas de Los Poderes de los Elementales
y cuyas parejas resultan de combinar un signo con el que le sigue después de
saltarse 3 signos entre ellos. Así tenemos:
Tenemos un quinto lote de 12 parejas de signos
obtenidas al aparear a un signo con el siguiente después de saltarse 4 signos
entre ellos. Aparecen entonces las siguientes parejas: Aries-Virgo,
Virgo-Acuario, Acuario-Cáncer, Cáncer-Sagitario, Sagitario-Tauro, Tauro-Libra,
Libra-Piscis, Piscis-Leo, Leo-Capricornio, Capricornio-Géminis,
Géminis-Escorpio, Escorpio-Aries. Todas ellas originan a la estrella de 12
puntas en el círculo zodiacal.
El siguiente lote es de 6 parejas,
puesto que éstas se forman combinando a los opuestos, vale decir: Aries-Libra,
Tauro-Escorpio, Géminis-Sagitario, Cáncer-Capricornio, Leo-Acuario,
Virgo-Piscis, y representan a los puntos cardinales.
Las parejas del mismo signo implican
hacer un recorrido de 360º por el círculo zodiacal, lo cual significa pasar por
todos los signos. Por tal razón cada una de ellas está incluída en las 12
parejas del primer lote.
Al totalizar el número de
parejas obtenidos por cada lote, obtenemos 66 parejas, a las cuales tenemos que
añadir las doce del mismo signo que contabilizamos en el primer lote, lo cual
suma 78 posibilidades de hacer parejas entre los signos zodiacales.
CORRESPONDENCIA
1 verdad
49 sabiduría 97 entendimiento
2
salvación
50 suministro 98 transfiguración
3 control
51 transformación 99 piedad
4
cumplimiento 52
iniciación 100
misericordia
5 victoria
53 infinitud 101
conocimiento
6
coordinación 54
alegría
102 atrevimiento
7
confortación 55
consagración
103 realización
8
equidad
56 aceptación 104
perdón
9 asumisión
57 comunión 105
trascendencia
10 ascensión
58 armonía 106
servicio
11 logro
59 complementación 107 redención
12 ubiquidad
60 creactividad 108 elevación
13 templanza
61 liberación 109 ultimación
14 tranquilidad
62 eternidad 110
agradecimiento
15 obediencia
63 contentamiento 111 silencio
16 justicia
64 vibración 112
persuasión
17 resurrección
65 entrega 113 santificación
18 discernimiento 66
adoración
114 existencia
19 unidad
67 pureza 115 caridad
20
impersonalidad 68
otorgamiento
116 sostenimiento
21 quietud
69 permeabilidad
117 lealtad
22 altruismo
70 constancia 118 libertad
23 perfección
71 presencia 119 balance
24 cancelación
72 felicitación 120 fidelidad
25 fuerza
73 inspiración 121 decisión
26 rectitud
74 perseverancia 122 revelación
27 intuición
75 contemplación 123 atención
28 voluntad
divina
76 fortaleza 124 orden
29 permanencia
77 consideración 125 justeza
30 afirmación 78 consumación 126 manifestación
31 amistad
79 concentración 127 iluminación
32 aspiración 80 concepto inmaculado 128 intercambio
33 vitalidad
81 búsqueda 129 éxtasis
34 paz
82 visión 130
igualdad
35 acción
83 determinación 131 consciencia
36 razón
84 valor 132
recepción
37
transmutación 85
fe
133 hermandad
38 paciencia
86 tolerancia 134
preservación
39 reconciliación 87
hospitalidad
135 bendición
40 comprensión
88 inteligencia constructiva
136 sanación
41 reversión
89 expansión 137
compensación
42 oración
90 tratamiento 138 reverberación
43 unión
91 bondad 139
belleza
44 inmanencia
92 intención 140 compartir
45 generación
93 consejo 141
responsabilidad
46 gloria
94 claridad 142 esperanza
47
remembranza 95
compasión
143 dirección
48 comunicación 96
asistencia 144 mediación
Esta correspondencia de número y
verbo otorga la substancia al libro.
Si partimos de una base matemática
equilibrada, balanceada, armónica, rítmica, en definitiva, lo que hemos llamado
mágica, podemos esperar que al hacer la correspondencia con el verbo,
obtengamos oraciones igualmente mágicas, con la sóla condición que el valor y
significado de dichos verbos sea el mayor posible.
Basta sólo que el arquetipo cósmico
sea captado por estas oraciones, y ésto es posible sólo cuando Él habla y hace
en mi.
Éstos 144 verbos tienen el máximo
valor y significado moral y ético. Fueron canalizados anteriormente a la
escritura de este libro por ELIEZER, a quien le he dedicado el fruto de esta
plasmación.
Representan las virtudes del Ser,
pilares de luz, cualidades divinas. Sus conexiones marcan los caminos a
recorrer por el nuevo “Árbol de
De
1 en 1
ARIES-TAURO
127 141
116 49 63
38 88 102
77 22 36
11
117 128
139 39 50
61 78 89
100 12 23
34
140 115
129 62 37
51 101 76
90 35 10
24
94 108
83 16 30
5 121 135
110 55 69
44
84 95
106 6 17
28 111 122
133 45 56
67
107 82 96
29 4 18
134 109 123
68 43 57
13 27 2
91 105 80
58 72 47
124 138 113
3 14 25
81 92 103
48 59 70
114 125 136
26 1 15
104 79 93
71 46
60 137 112
126
52 66 41
130 144 119
19 33 8
85 99 74
42 53 64
120 131 142
9 20 31
75 86 97
65
40 54 143
118 132 32 7
21 98 73
87
Yo
Soy
Yo
Soy
Yo
Soy el Compartir, por lo que la caridad se convierte en el éxtasis del
desapego, conduciéndome por tiempo sin
tiempo de la eternidad para transmutar la escasez en abundancia; para
transformar la pobreza de espíritu en las riquezas del corazón; para conocer de
la fortaleza y del tratamiento de la acción que me asciende a las esferas más
sublimes donde toda duda, todo reclamo se cancela, Yo Soy
Yo
Soy
Yo
Soy el Valor, por lo cual la compasión está siempre al servicio, coordinando la
resurrección de la voluntad divina con mi silencio para revelar a la hermandad
y generar aceptación y pureza. Yo Soy.
Yo
Soy
Yo
soy
Yo
Soy el Control, por lo que disfruto de la tranquilidad y la fuerza para buscar
intencionalmente la realización, de la comunicación y su complementación, y de
la constante existencia de la justeza y la sanación. Yo Soy.
Yo
Soy
Yo
Soy
Yo
Soy
Yo
Soy


